Tony (Click en la foto para verla grande)
Volví a pasear entre las nubes esta tarde como aquel día.
Siempre me ha gustado la niebla, quizás porque los colores cambian de un instante a otro en momentos por el capricho del viento.
Era una niebla inquieta que tan pronto se plantaba en una manzana tan solo y al poco rato estaba al fondo de la avenida. Pero yo he preferido verla esta noche desde arriba, disfrutando el ocaso mas despejado con las nubes bajo mi mirada.
He vuelto a subirme en la vieja muralla derruida frente al mirador, invadida toda por las hierbas silvestres que la forran con su manto verde y salvaje.
Y ahí abajo de nuevo el mar de algodón que son las nubes asentadas ahora a ras de suelo mojando la floresta y poniéndola aun mas verde si cabe.
Luego al rato una joven pareja en el mirador se arrullaban iluminados por los últimos rayos rojizos de un sol que se resistía a dejar ese escenario mágico y fantástico.
Y poco a poco llego el frío de la noche, y el silencio lo lleno todo con su estruendo oscuro y húmedo.
tonyClick en la foto para verla grande
6 comentarios:
Bonito mar de nubes para aderezar tus letras
Besos
Ese mar de nubes tan hermoso me recuerda a Tenerife....una delicia para los ojos.
Besos.
Bello horizonte. Un saludo!
Me encanta subirme ahi arrriba en lo alto del castillo y ver las nubes desde arriba.
Es de una tranquilidad maravillosa plantarse ahi arriba, sentarse con la musica en los oidos y dejar pasar el tiempo.
Gracias Ari.
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